Iniciamos por el final...

Estoy pensando... en abrir otro blog para fragmentos sin sentido... ¿Qué te parece Frank?

Y mirando a través de lo que era una simple rama de maple, el niño intentaba tapar la enorme nube de tormenta.

TlacuaCha se reía.

"Pero qué tonto, ¡es más fácil si cierras los ojos!"

Y el niño volteó a mirarle mientras cerraba un ojo marrón.

-Hace mucho que nos conocemos...
-Hace mucho...
-La nube ya viene...
-La vida también...
-La vida se fue ya...
-Se fue lo que eras...
-¿Era?

TlacuaCha se echó a reír.

El niño miró a través de la nube, allá, al otro lado había otra cosa... ¿otra vida, otro mundo, un FIN caligrafiado a tinta?

-Es hora de irme... ¿crees que nos volvamos a ver?
-Eso no lo sé.

Y rió de nuevo.

Era la tercera vez.

Entre carrizos descompuestos se escuchaba una melodía. Uno de ellos aún estaba afinado.

-Recordaré esta canción... recordaré este sentimiento...
-Todo se olvida, nada te puedes llevar...
-Es posible llevarlo... dentro de mí, escondido... no recordaré mucho, pero lo reconoceré de alguna manera, tendré la nostalgia, una sensación borrosa de esto que fui...
-Sufrirás...
-Sí... espero perdonarme...

Y el cuento comenzó.




Nos vemos.

Mitos absurdos de mi antier.

Y entonces, el sol que andaba tan aburrido cayó sobre la tierra para abrasarla... pero he aquí que ocurrió el milagro, y el sol que siempre se había visto chico pero siempre había sido grande, se volvió tan pequeño como su imagen, y sólo cayó una pequeña roca inflamada que se extinguió en el fondo de un lago donde la luna reflejada y menguada, no paraba de reír... o a la mejor estaba triste, todo depende de tu perspectiva...

(Senseless Myth, 3:34,8 segundo párrafo tercer jeroglífico a la vuelta de la tercer tablilla en el cuarto pergamino a mi derecha, tu izquierda)

Sea un buen día... que así necesita serlo. Karl...

Nos vemos.

El pasado me abraza.

Frank… mi pasado dice que lo abandoné, ¿es verdad?

Los recuerdos se han vueltos escasos, ya no recuerdo lo que pasa, lo he dicho ya antes, lo sé. Pero cada vez todo es más borroso, cada vez lo que ocurre en la mañana me parece por la tarde que ha sido años atrás. Es una sensación intensa… vacua, borrosa…

Cuando niño, soñaba que mis días no terminarían. Soñaba con que tal vez todo era una mala pasada y que en realidad todo seguiría así por la eternidad: despertar, arreglarse, la escuela, la comida, el juego, dormir, despertar, arreglarse, la escuela, comida, tarea, el juego, dormir, despertar, jugar, comer, jugar, dormir… Estaba asustado, rezaba porque nada cambiara, rezaba porque nada fuese diferente, y año tras año veía con deleite que las cosas no cambiaban en realidad. Yo no sentía cambios, tal vez yo no cambiaba, y así acabé engañándome. Llegaron días y años, y para seguir el juego, decía yo que ya había crecido, todo seguía siendo lo mismo pero había que hacerle al juego, y así, poco a poco, me volví a engañar… Y ahora, me doy cuenta que me engañé de pequeño al creer que las cosas no pasarían, ya han pasado. Y ahora, me doy cuenta que me engañé al seguirles el juego, pues resulta que era en serio.

Me duele tanto… las cosas… la vida… la nada…

La muerte no era algo que me espantase, no me importaba en realidad el cielo o el infierno, los soportaría a los dos (pues los dos me eran igual de indeseables, ya fuera una soledad absoluta, ya una comunión donde existías sin existir). Pero nunca soporté la idea de la nada, y hoy, mientras intentaba dormir en la tarde, el miedo espantoso me agarró y me destrozó por dentro… La parte de la vida que deseabas pasó, el resto pasará también, y lo pasarás mal mientras que al final te queda la nada, y desaparecerás, serás nada, ¡desaparece!

¡DESAPARECE!

¡¡¡Jajajjajajaja!!!

……….. ;_;

Nos vemos...

¿o tal vez no?

Y la Nada devoró Fantasía...

Karl, no le digas a Frank...

Y nada tiene sentido...

¿Y qué sentido debía tener?

Cada cosa tiene su sentido, pero nosotros inventamos otro sentido... un sentido que el mundo no puede tener.

Creamos una cuchara para comer sopa, creamos una vela para ver en la noche, crearon al hombre para... ¿para qué?

Y no hay respuesta, a lo mucho inventamos a una suerte de hombre superior que creó a este hombre con el fin de... ¿con cuál fin?

Y tampoco hay respuesta...

Estoy cansado...

Estoy extenuado...

Ya no puedo ver hacia al frente...

Y el pasado se disuelve en pesadas cargas sin rostro, algo que estaba ahí y que ahora es nada, una nada que pesa, una nada que no recuerdo pero duele...

Sabemos que nada tiene sentido, sabemos que todo terminará en nada, ¿por qué nos aferramos entonces a criar a las nuevas generaciones con el ánimo de que hay algo más, mancillándolas con la idea de que hay un sentido, un concepto de sentido que es impío porque no corresponde a este mundo ni a ninguno otro?

Nada era...

Nada será...


Y...

Hace tiempo decía:

"El día que me vaya a matar, primero haré todo aquello que siempre quise pero nunca me atreví".

Hoy, al recordar mi resolución infantil que sin embargo mantenía como férrea promesa de hombre, tuve que contestar admitiendo:

"Ya no hay nada que quisiera hacer..."

Ahora sólo me detiene mi cobardía, aversión al dolor...

Espera... tal vez haya algo más que hacer, pero es algo que no podría hacer, ni si quisiera vivir, ni si quisiera morir...

Entonces... sólo hay que poner fecha, y empezar a ahorrar valor.

Nos vemos...