Desde el Estigia y a través del Leteo.

Soy Pepe y estoy aquí, ¿puedes verme? Sólo quiero mirar y hablar un poco, mirando a través del río terrible que es el Estigia, y pasando con cuidado por el Leteo, que en cualquier momento y descuido se comerá todos los recuerdos.

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Nombre: Pepe
Ubicación: Ninguna, Región este.

Érase yo, y me perdí, desde entonces vago. Me gusta platicar, me gusta admirar, me gusta contar, y si no hay nada más, vamos a gritar. Si la tranquilidad es adecuada, dormiré, mayor delicia no hay.

sábado

Pocos ánimos...

Aló Karl:

En estos días me siento desanimado e incluso me cuesta trabajo escribir. Alguien me echaría en cara que hoy en la mañana en vez de terminar de leer la tarea me entretuve escribiendo un pequeño cuento y no creo sea una excepción, sino un caso distinto. Suelo escribir ya sea por inspiración repentina (que no siempre aprovecho) o por iniciativa propia, ya sea para contestar una carta o escribir alguna entrada digna de leerse. Lo normal es que a lo mucho la primera línea de estos escritos intencionados sea la que da muestras de rebeldía y recelo para ser escrita, pero el resto surge con naturalidad. En estos días, en pocas y llanas palabras: no siento deseos de escribir.

Aunque tenga un buen tema los ánimos me abandonan de inmediato y en el caso de escribir, quedaría con esa sensación de que todo lo que escribo sale horrible, muy contraria a la habitual sensación de que las palabras suenan y fluyen con naturalidad... aunque les admito, rara vez leo de nuevo algún escrito por temor a descubrir que en realidad es un fiasco.

Me empieza a dar algo de sueño... tal vez deba ser hora de ir a dormir.

Mañana será otro día... otro día... no me emociona mucho que digamos.

Nos vemos, y disculpen lo depresivo, soso y sin contenido de este escrito