Sueños ominosos.

Fue un mal sueño Frank... y no pude descansar.

Tras varios minutos destendiendo la cama sobre la que había dormido, logré conseguir la conciencia. Varias veces había despertado pero siempre tan nublado mi conocimiento que mis pensamientos seguían siendo sueños y no tardaba en caer en garras oníricas de nuevo. Cuando logré levantarme, ya no recordaba el sueño, un sueño que había sido discutido y analizado en la semiconsciencia hasta el cansancio, hasta volverse una premonición ominosa y cruel, hasta confundir mi mente y dejarme intranquilo. Sólo recuerdo un poco:

"...sólo recuerdo algo como de un dibujo que era como un círculo y que podía interpretarse de dos maneras, cada manera hacía alusión a una persona diferente, un poco como una premonición... ...era un dibujo como de una serpiente submarino de metal, pero lo importante es que el dibujo en sí representaba un círculo perfecto. Sí... un círculo... perfecto..."

*Fragmento de los delirios del joven Pepe, esto fue lo único que se pudo sacar en claro de sus constantes balbuceos.

El sentimiento en el estómago, la extraña sensación de que algo horrible pasará y que no cesa. Me agito y quisiera correr para evitarlo pero... ¿qué es, qué pasará, dónde, a dónde debo ir? Y al final nunca pasa nada, sólo me queda el eco de aquel sentimiento de desesperación e intranquilidad.

Y así, los sueños que debían de descansar mi alma y reparar mi cuerpo lo agotan y la envenenan, y me quedo sentado al borde de la cama, con la mirada perdida y aquel sentimiento de que algo terrible, que jamás pasará, sucederá...

Nos vemos.